Nos sacamos la mufa

Tras 10 meses, Rampla Juniors volvió a ganar en el Estadio Olímpico. Los picapiedras obtuvieron su primera victoria desde su regreso a Primera División, vapuleando 4-2 a Atenas de San Carlos. Tuvieron que pasar 7 partidos para que volviéramos a festejar en nuestra casa. ¿Habrá influido el retiro de los macetones que estaban a la salida del túnel?

Era un partido clave, ante un rival directo en la lucha por la permanencia. El triunfo era imprescindible, también para que el plantel pudiera sacarse la mufa y comenzar a crecer en confianza. El gol rápido de Aprile en el Primer Tiempo abrió el camino, y tras padecer unos minutos de zozobra al final de esa mitad inicial, Rampla liquidó a su rival gracias a la potencia y velocidad de Paul Dzeruvs y Francis D’Albenas.

Sin Gonzalo Malán, lesionado, y con Dzeruvs y Marcel Román sustituyendo a Nicolás Vigneri y Gonzalo Vega por razones tácticas, los dirigidos por Saralegui pasaron a jugar con un sistema 4-4-2. Bernardo Long estuvo en el arco; Fabián Vargas, Emiliano García, Jonathan Píriz y Emanuel Cuello en la defensa; Jorge Anchén, Bruno Barreto, Marcel Román y Gustavo Aprile en el mediocampo; Paul y Francis en ofensiva. Long fue capitán por primera vez.

De entrada se vio que la intención de Rampla era presionar al rival en la mitad de la cancha y lanzar rápido a los delanteros, tratando de aprovechar su velocidad. Empezó muy bien Dzeruvs, poniendo el cuerpo y generando varias faltas. También fue interesante el comienzo de Aprile. Y ambos serían directos responsables del primer gol picapiedra.

Antes de eso, se juntaron para generar peligro sobre el arco de Atenas. Ya a los 2 minutos, el rasta buscó por arriba a Paul, que no llegó por muy poco a desviar la pelota ante la salida de Barlocco. Minutos más tarde, a los 11’, Dzeruvs le ganó la posición a su defensor, desbordó y metió un pase al medio que le quedó un poco atrás a D’Albenas. De todos modos el rubio delantero volvió sobre sus pasos y pudo rematar. El tiro rebotó, lo tomó Aprile y su disparo se fue apenas por arriba del horizontal.

A los 16’ llegó la apertura. Falta sobre Paul, ejecutada por Jorge Anchén. Aprile entró por el segundo palo y con un toque de su botín izquierdo cruzó el balón hacia el poste opuesto del arco visitante.

De ahí en adelante Rampla replegó un poco sus líneas y Atenas comenzó a apoderarse del control del balón, pero sin inquietar a la valla defendida por Bernardo Long. Recién sobre el final de la primera mitad los carolinos llegaron con peligro.

Bernardo apareció con una notable atajada a los 33’, tras un remate de media distancia de Michel Acosta, un corpulento volante central ateniense, de buena pegada, que ya hemos visto varias veces jugar muy bien contra nuestro equipo.

A los 43 minutos Atenas tuvo la más clara. Vino un córner, Emiliano García pifió la pelota y esta le quedó a un jugador visitante. Long salió rápido y pudo ahogar el remate. Después despejamos pero la guinda le quedó al número 10 rival, que le pegó violentamente y la pelota se fue afuera. Pasó el sofocón y llegó el final del Primer Tiempo.

Para la segunda mitad apareció Diego Galo en lugar de Bruno Barreto, que salió lesionado. Diego se ubicó en la banda derecha y Anchén pasó al doble 5 junto a Román. Atenas adelantó sus líneas y eso iba a dejar muchos espacios en su retaguardia que si Rampla los sabía aprovechar podía liquidar el pleito.

La primera la desperdiciamos. Fue a los 5 minutos. El “Coto” Vargas robó la pelota y la jugó en largo para Dzeruvs, que se fue solito hacia el arco. Dudó entre patear o intentar eludir a Barlocco, y finalmente optó por esto último, perdiendo el duelo con el ex arquero picapiedra. Más adelante Paul tendría su revancha personal.

A los 9’ cayó el segundo gol. Buena combinación entre Cuello y Aprile, pase del rasta para Dzeruvs, que gana la posición, se acomoda bien, gira y tira al arco. Barlocco da rebote y D’Albenas entrando por el medio se tira sobre el balón y lo empuja ante el arco vacío. Gran oportunismo del delantero cedido por River Plate.

Casi enseguida llegaría el tercer gol y Rampla comenzaría a liquidar el pleito. D’Albenas quedó mano a mano con un defensa, y a pura potencia y velocidad le tiró la pelota por un lado y lo eludió por el otro. Pisó el área y esperó el momento justo para tocar la pelota y propiciar el contacto del arquero rival. El juez Martín Vázquez al principio dudó pero luego cobró el penal a instancias del línea.

Lo iba a patear Jonathan Píriz, pero Paul se lo pidió. Era la oportunidad para sacarse la mufa y romper la sequía. Píriz ni se lo discutió. Dzeruvs le pegó bien, cruzado, y pusó el 3-0 para Rampla.

La ventaja de tres goles era suficiente como para estar tranquilos, pero esto es Rampla y sabemos que siempre tenemos que sufrir, aunque sea un poquito, y a los 26’ Atenas acortó distancias. Desborde por derecha, buscapié al medio, Long que no puede quedarse con la pelota por un mal pique de la misma y toque a la red de Leandro Sosa entrando por el medio.

Con el 3-1 en el marcador volvían los “fantasmas” de aquel partido en Florida contra El Tanque. Sin embargo, por suerte esta vez el desenlace sería otro. Salvo por un par de tiros de esquina, la visita no estuvo cerca de un nuevo descuento. Al contrario, era más probable un cuarto gol de Rampla que el segundo de Atenas, y ambos llegarían en los minutos finales.

Primero fue el picapiedra que aseguró la victoria a los 45 minutos. Anchén robó la pelota en el mediocampo y la pasó rápido para D’Albenas. Francis la aguantó, levantó la cabeza y se la cedió en el momento justo a Paul, que esta vez remató de primera y metió la guinda en el arco pasándola por entre las piernas de Barlocco.

Solo hubo tiempo para otro gol de Atenas en el último minuto de descuento, tras una jugada algo curiosa. Un remate de bolea tomó un efecto extrañísimo y obligó a una notable atajada de Long, que sacó la guinda del ángulo, pero en el rebote el goleador ateniense Santiago Barboza.

Victoria clara y contundente de Rampla ante un rival que mostró importantes debilidades defensivas. El triunfo se basó en una correcta actuación colectiva y un par de muy buenas performances individuales, las de Gustavo Aprile, Francis D’Albenas y Paul Dzeruvs.

Ahora enfrentaremos a Wanderers en el Parque Viera y la historia será completamente distinta. Un rival muy exigente en una cancha que siempre fue difícil, pero donde también tenemos un grato recuerdo: el último ascenso logrado hace unos meses ante Villa Teresa. Ojalá podamos volver a retirarnos felices. Arriba Rampla!

Comentario: Mr.Baru (@crearoreventar)

Saca tan buenas fotos que se las roban y borran su firma: Adrián Barreto (@adribarreto90)
No sabemos qué hizo con los pegotines: Emilio Fernández (@durosconceptos)