lunes, 27 de agosto de 2018

La tarde de los recuerdos

En estos días donde la nostalgia está en todos lados y los recuerdos invaden al pueblo uruguayo, Rampla nos regaló una tarde que quedará por mucho tiempo en nuestra memoria. Tras ir perdiendo 3-1 en una cancha siempre difícil como el Saroldi, los picapiedras lograron dar vuelta el resultado y llevarse un resonante triunfo 4-3 que en cierto modo nos hizo rememorar el 5-4 a Cerro Largo.

Este grupo de futbolistas ya ha dado muestras de su entrega y compromiso con la causa. Fueron varios los partidos donde cayeron en desventaja pero lucharon hasta el final por revertir el resultado. La mayoría de las veces no se pudo, es cierto, pero lo bueno es que últimamente eso está cambiando. Primero fue el valioso 2-2 ante Defensor y ahora esta notable victoria sobre River.
El tema es que a esta entrega le hacía falta buen juego, y eso comenzó a aparecer en la medida que se le fue dando cabida a individualidades que pedían pista a gritos. El ejemplo más claro es el de Matías Cóccaro. Y también poniendo en cancha a muchachos curtidos con nuestra camiseta. No es casualidad que Felipe, Olivera, Leites y Cándido hayan estado en aquel 5-4.

La mejoría en el funcionamiento ya se empezó a notar en el triunfo contra Racing, la semana anterior. Segurmante por eso Rampla presentó una sola variante respecto a la oncena titular de aquella tarde: el ingreso del colombiano Jonathan Herrera por su compatriota Fabio Burbano, que se perdió el choque ante los darseneros por lesión.

Rodrigo Odriozola en el arco; Mauricio Felipe, Gonzalo Rizzo, Edgar Martínez y Camilo Cándido en la defensa: Gastón Díaz y Jhony Galli por el centro; más adelante Cristian Olivera, Adrián Leites y Jonathan Herrera; como única punta Matías Cóccaro.

 
En el primer tiempo los rojiverdes fueron prolijos en el trato de balón hasta tres cuartos de cancha. De ahí en adelante costaba mucho encontrar los huecos para entrar al área. La idea era que Leites y Díaz metieran pases en profundidad para Cóccaro o para las diagonales de Olivera y Herrera. Ambos llegaron a pisar el área con peligro pero sin posibilidades de definir.

El colombiano tuvo un remate de media distancia que pasó muy cerca del ángulo y, en una de esas diagonales, un cabezazo para sorprender por arriba al arquero Nicola (que había salido a achicar), pero sin fuerza ni dirección apropiada.

River por su parte parecía ser más dinámico en el mediocampo pero tampoco generaba nada. Tuvieron un tiro de esquina que desviaron en el primer palo y sacamos en la línea, y el tiro libre notablemente ejecutado por Jones que a los 38 minutos se convertiría en el 1-0 para los locales.

En la última jugada del primer tiempo, Edgar Martínez cabeceó notable tras un tiro de esquina pero la guinda pegó en el travesaño, en la espalda de un futbolista rival y salió. Increíble lo mal que ligamos.
 
Así nos fuimos al descanso con la sensación de que no era justo que Rampla estuviera perdiendo. De movida Fuentes puso a Martiñones y sacó a Díaz, pasando Leites como volante central junto a Galli. Olivera y Herrera ocuparon los extremos, y el “Rata” se fue de punta junto a Cóccaro.

No tuvimos tiempo ni de acomodarnos cuando cayó el 2-0 para River. A partir de un saque lateral, le ganaron la espalda a Cándido, la metieron al medio y Odriozola no llegó al cierre, rematando Urruti totalmente desmarcado.

Este gol parecía un masazo pero los rojiverdes reaccionaron rápidamente. A los 4' Camilo la puso al medio, Cóccaro habilitó de pecho a Martiñones y el goleador se sacó de encima al arquero y definió con tranquilidad, por entre las piernas del defensa que había quedado en la raya del arco. Partido 1-2 y todo el complemento por delante.

Ya sobre el minuto 6 pudo estar el empate pero otra vez el palo nos lo negó. Tras un tiro de esquina Cóccaro ganó de cabeza, la guinda salió mordida y pegó en el travesaño. En el rebote la sacaron justito de la raya. Increíble.

A esa altura ya estaba Hugo Dorrego para ingresar, y el colombiano Herrera era el hombre para salir. Sobre los 10 minutos, y en pleno dominio picapiedra, llegó el 3-1 para River. Leites la perdió en la salida y con un par de toques pudieron dejar a Ospitaleche (el que había iniciado la acción) con la chance de definir ante el arco libre. Parecía lapidario, pero Rampla es Rampla y estos jugadores saben que con esa camiseta puesta deben luchar hasta el último instante.

Un claro ejemplo fue lo que hizo Cóccaro a los 19', yendo a pelear una pelota perdida contra el ex picapierda Emiliano García. El “gallego” la tocó atrás para el arquero pero le quedó corta, el “canario” le ganó la posición y lo obligó a cometerle falta en el borde del área. Bien Andrés Cunha sancionando la infracción y mostrándole la tarjeta roja al defensor.
 
El tiro libre era quizás más peligroso que la jugada interrumpida, estando Dorrego para la ejecución. Hugo sacó un tremendo remate, fuerte y bien dirigido al palo del arquero que Nicola Pérez sacó con flor de atajada. Faltaba casi media hora y con un hombre más empatarlo no era una quimera.

Julio Fuentes no se cansaba de pedirle calma a los muchachos. Justo es decirlo, el equipo local parecía manejar con comodidad el trámite, pese a la inferioridad numérica. Incluso contaron con un par de contragolpes muy propicios para meter el 4-1. En un par de ocasiones apareció Odriozola salvando su arco, y también fue tremendo el despliegue de nuestros defensas.

Al minuto 27 se realizaría el último cambio en Rampla: Delis Vargas por Mauricio Felipe. Línea de 3 en la defensa y Vargas parándose casi como puntero derecho. Los darseneros ya no se soltaron con tanta libertad al ataque y el partido pasó a jugarse enteramente en campo de River.

Fueron fundamentales las subidas de Cándido por izquierda. Mostrándose siempre como opción y metiendo balones “venenosos al área”. Con esa receta llegó el 2-3 al minuto 34'. Centro de Camilo, la peina Leites en el primer palo y en el segundo Martiñones la desvía de forma acrobática para ponerla en el ángulo y dejar sin chances al arquero.
El olfato goleador del “Rata” es tremendo. Siempre se las ingenia para mandar la bola al arco, no importa si está marcado o libre, si es de cabeza o con la punta del zapato. Su oportunismo fue fundamental en ambos goles.

Ahora si, quedaban 10 minutos y el empate estaba a la mano. River hacía tiempo y sus jugadores la sacaban para donde podían. Sobre los 41 minutos llegaría el ansiado y merecido empate. Camilo la inició, Martiñones se la dejó a Leites y fue a buscar la devolución, Adrián la pinchó para el “Rata” pero en el medio estaba Cóccaro, que la mató de pecho y con una chilena espectacular la mandó a guardar.

Impresionante gol del “Canario”, que ya había ensayado una parecida ante Danubio por el Torneo Apertura, aquella vez salvada por el arquero. Esta vez el guardameta solo pudo mirarla. Uno de los mejores tantos del campeonato sin dudas.
 
El empate ya era buen negocio para los picapiedras, pero nada de conformarse con eso. A los 47' Martiñones luchó una guinda contra la raya y se la pellizcó justo al defensor darsenero que estaba haciendo pared para que la pelota se fuera sola afuera. De inmediato puso un centro corto y Cóccaro anticipó a su marca para meter un impecable cabezazo que se metería contra el ángulo del segundo palo. LOCURA TOTAL en la tribuna ramplense.
 
Como esto es Rampla siempre hay un espacio para el sufrimiento. En los minutos finales llegaron un par de centros peligrosos al área pero nuestros muchachos desactivaron el peligro. Hasta que pasado el minuto 50 el juez Cunha señaló el final del match. Inolvidable triunfo picapiedra y muy merecido para estos muchachos que siempre dejan todo en la cancha.

El próximo sábado Rampla enfrentará a Wanderers en el Estadio Olímpico.

Comentario: Marcelo Baruffaldi
Fotos: Adrián Barreto
Defensor de las causas justas y de los futbolistas que no merecen ser agraviados: Emilio Fernández 

RESUMEN TELEVISIVO DEL PARTIDO

1 comentario:

  1. Exelente comentario !! Gracias por hacerme partícipe de tan linda noticia.

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