Los rojiverdes de Añón, luego de tres victorias en tres partidos, no presentaban cambios. A la cancha salieron R. García; G. Dutra, W. Techera, S. Flores, C. Cándido; C. Flores, A. Paleso, N. Rocha, G. Sena; J. Toscanini y M. Rigoleto.
El primer tiempo fue muy parejo y disputado. El medio campo era dónde se disputaba mayormente el balón sin inquietar de gran forma en los arcos. De todas maneras el Picapiedra pudo abrir el marcador ni bien arrancó el encuentro de la mano de Rigoleto, el ariete remató, el golero la sacó y Pérez no puede abrir el marcador. Los primeros minutos veían a Rampla quitando balones en la presión alta pero no pudiendo concretar: fallando principalmente en el último pase.
La tranquilidad de la primera mitad se vio afectada por un técnico que cobró el siempre (no tan bien) recordado Juncal. Lo que fue un claro despeje de Flores que cayó en las manos de García, fue interpretado como un pase atrás por parte del colegiado. Un penal con barrera, nunca mejor dicho. En la barrera no estaban solo los 11 jugadores rojiverdes sino también sus familias, los hinchas que fuimos y nuestros paraguas, los que no pudieron estar en Canelones y muchos más. En resumen todo el pueblo Picapiedra. Por suerte luego del pase atrás la pelota rebotó en alguna camiseta rojiverde y no fue la apertura del score para los locales. “Si salimos de esta lo ganamos” se escuchó en la tribuna, así fue.
Sobre los 36’ de la primera parte, cuando lo mejor de Rampla estaba por derecha, Pérez robó un balón, tocó con Dutra quien envió el centro que no pudo conectar Toscanini. Esa fue, sin dudas, la mejor jugada colectiva de Rampla en un primer tiempo muy disputado.
Sobre el final de la primera parte, también por derecha, una llegada de Pérez redundó en un rebote que le quedó a Rocha en la medialuna. El volante central, de buena labor llegando al área, no pudo conectar de buena forma y su remate se fue por arriba del travesaño. Fue el propio Pérez, sobre el final de la primera parte, quien tuvo también su chance que se fue cerca del palo.
El terreno de juego -en buen estado pero rápido por la lluvia-, el rival aguerrido y los pocos espacios fueron las razones por las cuales en la primera mitad aún no habíamos visto todo lo que Rampla podía dar.
Para la segunda mitad, G. Allala ingresó por Flores dado que este último se encontraba sentido. A los 5’ del complemento también ingresó Sergio Souza por Jesús Toscanini quien peleó muchísimo pero no tuvo chances claras.
En los primeros minutos del complemento Oriental se venía con todo, sobre todo por las bandas y Rampla resistía como podía.
La primera clara de los dirigidos por Añón fue recién a los 10’ del complemento cuando movieron rápido tras una falta en 3/4 de cancha, Sena envió el centro y Souza no pudo completar el cabezazo.
Fue 5 minutos más tarde, a los 15’ del complemento, cuando vivimos la alegría de la tarde. Ángelo Paleso, la figura de Rampla por sacrificio y juego, tomó un balón a 15 metros del área rival, se vio libre de marca e hizo lo que la tarde pedía; remató violentamente y rasante disparo. La pelota iba esquinada y le picó un metro antes al golero local complicando su intervención. ¡Golazo! Rampla se ponía en ventaja y empezaba el partido que mejor sabe jugar.
Minutos más tarde, Serrón ingresó por Pérez -de correcta labor- buscando darle más explosión a los contragolpes rojiverdes. Los locales se acercaban con algún tiro libre y metiendo muchos balones al área. La defensa de Rampla se las ingeniaba para sacarla al igual que Rafa García cuando le tocaba actuar.
Rampla pudo haber aumentado el marcador a los 25’ del complemento haciendo lo que mejor sabe hacer; quitando el balón en la presión alta y contragolpeando rápido. Rigoleto logró meterle un pase en profundidad a Souza, que picaba con Sena, el primero definió y el balón se fue cerca del primer palo. Era match point, no se dio y Rampla -como es costumbre- debía pelear hasta el final.
La visita también contó algún remate más de fuera del área; Sena pudo anotar de distancia sobre los 30’ del complemento encontrando una muy buena respuesta del golero local.
El partido se fue con los locales buscando y la defensa de Rampla despejando varios balones no sobrándole nada. García respondió cuando fue probado y así los tres puntos se fueron para la villa.
Al cabo de 4 fechas de un total de 14, Rampla lleva puntaje perfecto y apoya sus victorias en un rendimiento parejo y un plantel con variantes. Esta última victoria se sustentó principalmente en el sacrificio, la dinámica y en el gran despliegue de sus volantes centrales. Los laterales llegaron y quitaron como indica el manual y la defensa aguantó como se debe. Arriba los que están no dan nunca una pelota por perdida y eso resume el espíritu de este equipo.
Rampla deberá seguir sumando, por este camino, ahora toca el siempre difícil Progreso en el Olímpico, el próximo sábado a la mañana. ¡Vamos por el buen camino!
¡Fuerza Rampla, a seguir metiendo!
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