lunes, 9 de abril de 2018

Película repetida

Rampla Juniors fue al Campeón del Siglo a tratar de cambiar la historia y terminó viendo la misma trama de todo el campeonato. Como contra Fénix, Nacional, Progreso, Racing, River y Liverpool, el equipo comenzó perdiendo 2-0, y pese a que intentó reaccionar otra vez se quedó con las manos vacías.

Estamos hablando que en 7 de los 10 partidos disputados en el Torneo Apertura, los rojiverdes empezaron 2 goles abajo, y en ninguno de los casos pudieron revertir ese resultado adverso. Nuevamente los errores en la marca nos condenaron desde temprano.

Después sí, aparece la entrega, la garra, la concentración, y algún intento por mostrar un buen fútbol. Incluso en la mayoría de esos partidos se logró descontar y quedar a tiro del empate, pero tampoco tuvimos esa cuota extra de fortuna, lucidez o resto físico para alcanzarlo.

Esta derrota contra Peñarol sería decorosa sino fuera porque se dio de la misma forma que venimos padeciendo durante todo el torneo. Se puede rescatar la actitud, claro. Se puede valorar el haber estado cerca del empate contra un rival evidentemente superior. Pero no se puede negar la posición en la tabla. No se puede dejar de ver que hace 14 partidos que no ganamos por el Campeonato Uruguayo. No podemos darnos el lujo de seguir valorando derrotas.

Es hora de redoblar el trabajo, y de probar o intentar algo diferente. Hay jugadores en este plantel que han tenido pocas oportunidades y otros que lamentablemente ya han demostrado no estar en su mejor nivel. Quizás haya motivos que nosotros desconocemos, pero porque lo que mostraron en la cancha cuando les tocó jugar, sinceramente no entendemos como Hugo Dorrego y Matías Cóccaro pueden quedar afuera de la convocatoria.

Foto: Fotografías Fútbol Uruguayo.

Tampoco se sabe que pasó con el botija Píriz, el único lateral izquierdo propiamente zurdo que hay en el plantel (junto a Rosello que fue bajado a Tercera). Se equivocó contra UTC en Perú, es cierto, pero convengamos que lo de Benítez también fue bastante perjudicial y sin embargo sigue teniendo chances fin de semana tras fin de semana.

Para el partido contra Peñarol no podía estar Mauro Brasil (por cláusula en su contrato), y cuando varios esperábamos a Rizzo con Soto en la zaga (que juntos jugaron notable en la revancha contra UTC) apareció Willy Techera como titular, que pasó de no estar ni en el banco contra Boston River a titular en el Campeón del Siglo.

Cristian Olivera al banco y el brasileño Igor Paim desde el arranque. No es nada contra el botija norteño, que la verdad jugó un buen partido contra los aurinegros, pero ¿por qué sacar al “Mago” que siempre aporta buen fútbol y ha participado de la mayoría de los pocos goles que hizo Rampla?

Que quede claro que no es nuestra intención meternos en el trabajo del cuerpo técnico, pero todas estas cosas las hemos conversado con varios hinchas y la mayoría hacemos la misma lectura. Puede haber cuestiones de la interna que desconocemos y hay que darle la derecha a quienes están día a día con el plantel, pero también tenemos derecho a expresar nuestros puntos de vista.

Los once titulares para enfrentar a Peñarol fueron Rodrigo Odriozola, Mauricio Felipe, Willy Techera, Matías Soto, Gabriel De León, Ignacio Panzariello, Jhony Galli, Nicolás Rocha, Igor Paim, Diego Martiñones y Julián Lalinde.

Foto: Fotografías Fútbol Uruguayo.

A los 2 minutos, Techera cometió una falta (dudosa) y de pelota quieta ya nos hicieron el 1-0. Canobbio entró completamente solo, Martiñones lo perdió, nadie salió al cruce y con una pirueta el juvenil puso de taco la apertura en el marcador. Más allá de que el “Rata” no pudo seguirlo, quedó un hueco enorme en el centro del área que nadie supo cubrir.

El propio Martiñones casi marca el 1-1 a los 5’ minutos, cuando tras un córner la guinda quedó a la deriva y desde casi el área chica fusiló a Dawson, quien con notables reflejos la despejó como pudo. La pelota pegó en el palo y salió. La reacción de Rampla no fue más que eso, ya que Peñarol mantuvo su dominio.

Sobre el minuto 16’ llegaría el 2-0. Despeje corto de De León, centro de Estoyanoff y Maxi Rodríguez ni siquiera tuvo que saltar para de cabeza vencer a Odriozola. Felipe y Techera tampoco saltaron, solo acompañaron la jugada.

De ahí en más el aurinegro jugó con total comodidad. Casi llega el tercero a los 26’ tras una larga corrida de Cristian Rodríguez, quien definió apenas desviado ante la salida desesperada de Odriozola.

El picapiedra tuvo apenas una aproximación a los 38 minutos, cuando entre Rocha y Galli hicieron una buena jugada por derecha, Felipe metió un buen centro y Martiñones remató, desviándose la pelota en un rival y pasando cerca.

Para el complemento ingresaron Cristian Olivera por Panzariello y Matías Rigoleto por Lalinde. Paim pasó a jugar por derecha y metió buenas diagonales al centro. Una de ellas provocó una falta muy cerca del área (el tiro libre lo ejecutó Soto y pegó en la barrera) y la otra, bueno, también fue infracción al borde del área pero el juez Tejera (a instancias del línea) la cobró adentro.

Una jugada muy fina y difícil de apreciar en velocidad, pero justo es decirlo que la repetición muestra que no era penal. Lo ejecutó Martiñones, fuerte y al medio, y puso el 1-2 cuando iban 14 minutos del segundo tiempo.

Foto: Fotografías Fútbol Uruguayo.

El gol del descuento le dio un impulso anímico a los rojiverdes y puso un poco nerviosos a los aurinegros. Era el momento para dar el golpe de gracia y empatarlo. A punto estuvo Martiñones al minuto 21’, cuando bajó de pecho un envío aéreo, se sacó de encima a su marcador y definió con un toque suave ante la salida de Dawson. La guinda se fue por milímetros afuera.

El “Rata” a esta altura es sin dudas la mejor incorporación picapiedra para este 2018 (y pensar que casi no viene porque el elegido era Juan Cruz Mascia, quien finalmente declinó la posibilidad de venir a nuestro club).

Con el transcurrir de los minutos Peñarol se serenó y manejó el trámite con experiencia y carpeta. Rampla se fue quedando sin piernas, sin ideas y sin juego. Más allá de que la diferencia era solo un gol, no se veía por ningún lado la posibilidad de igualar. Ni siquiera pudimos meter un centro peligroso sobre el área aurinegra. Todos morían en las manos de Dawson.

El pitazo final llegó sin pena ni gloria para los rojiverdes. Una derrota más, quizás la menos dolorosa (por el nivel del rival) pero con el mismo sabor amargo que nos dejaron las demás.

En el próximo partido enfrentamos a Atenas en el Olímpico y será de vida o muerte. Un rival directo en la lucha por la permanencia y que perdió todos los partidos que jugó como visitante. Después tocará Danubio en Jardines, Torque de local y el clásico de visitante. Se necesitan por lo menos 9 de los próximos 12 puntos para recuperar un poco de terreno.

Ojalá este plantel y cuerpo técnico puedan sacar a Rampla de este difícil momento. Es lo que todos queremos. La directiva ya dio su respaldo y el apoyo de la parcialidad siempre estará. ¡ARRIBA RAMPLA!

2 comentarios:

  1. Concentrados? Cuando te hacen dos goles en pocos minutos?

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  2. Concuerdo en casi todo, hay jugadores que ya no pueden jugar más. Techera cada día peor y Soto al lado de él se descontrola, De León no marca, no centra bien, se hace echar, lamentable. Panzariello está bajo, no entiendo xq entra Benítez, y lo mejor de Rampla es el Mago y Martiñonez. Se extraña mucho a García, Prieto y Cándido. Urgente hay q cortar contratos y dedicarse a cubrir esos puestos! Este año nos podemos salvar, pero la veo difícil en el próximo.

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