En otra de esas “curiosidades” que nos regala frecuentemente nuestro querido fútbol uruguayo, Rampla Juniors perdió su partido y sin embargo amplió la diferencia en la punta de la tabla de posiciones.
Primero el viernes el Tribunal de Contiendas decidió por unanimidad declarar a los picapiedras ganadores del partido de la 4ta. fecha ante Plaza Colonia, con lo cual los rojiverdes sumaron 2 puntos más en la tabla.
Luego, el sábado con la derrota de Huracán y el empate de Rocha, pese a haber perdido con Deportivo Maldonado, Rampla gracias a esos 2 puntos sumados en la AUF logró ampliar la diferencia con sus más inmediatos perseguidores y hoy goza de una considerable ventaja de 5 puntos sobre Central Español y Rocha, que vienen en la segunda posición.
De más está decir que el saldo es muy positivo. Había que ser muy optimista para creer que una vez terminada la primera rueda, Rampla sería el único puntero del campeonato y contara con semejante diferencia a su favor. De hecho, era bastante impensado luego de perder con Canadian y malograr la chance de pasar al frente en la tabla.
Esta auspiciosa realidad seguramente fue lo que provocó que muchísimo público picapiedra se hiciera presente el otro día en el Méndez Piana. Por supuesto que a todos nos enorgullece la gran convocatoria que tuvo y debería tener siempre nuestro equipo, pero lo que no queremos es que esto termine siendo una piedra en el zapato para nuestros intereses.
Puntualmente, desde el primer minuto se notó como un nerviosismo excesivo en la tribuna. A juzgar por el clima reinante, parecía que si Rampla no ganaba se perdía el ascenso a Primera esa misma tarde. Se ve que hay gente que no siguió al equipo durante el campeonato y, condicionado por los números, se pensó que somos el Bayern Munich. No sé que pretendían, ¿una goleada desde el primer minuto?.
Quizás no están al tanto del enorme sacrificio que jugadores, cuerpo técnico y directivos hicieron para que hoy Rampla mire la tabla desde arriba. Quizás no saben que la divisional es muy pareja y que todos los rivales son difíciles. Que en un torneo tan cambiante, la clave del éxito es la regularidad. Que no gana el que juega más vistoso, sino el más práctico, el que mete los goles cuando los tiene que meter y los defiende cuando los tiene que defender.
Y el partido contra Deportivo Maldonado fue una muestra de lo que será la segunda parte del torneo para Rampla: todos los rivales nos van a jugar a muerte. No podemos esperar a que nos hagan un gol para despertarnos. Los fernandinos nos madrugaron y después se metieron todos atrás, es lo lógico. Nosotros hubiéramos hecho lo mismo. Hay que aprender la lección. Tenemos que salir a buscar el resultado e imponer nuestro juego.
La primera media hora, parecía Deportivo Maldonado el puntero. Nos metieron contra nuestra área, un poco también por esa mala costumbre que tenemos de defender muy atrás. Y fue por eso que Ale Rodríguez llegó a destiempo a un cierre y cometió penal. Esa falta debió ser afuera del área, no adentro. En esa nos salvamos porque la ejecución pegó en el travesaño y el mismo ejecutante convirtió el gol en el rebote, violando la vieja regla de “palo no habilita”.
Pero no nos salvaríamos a los 27´, cuando despejamos la pelota, rebotó en un propio futbolista nuestro y quedó boyando para que el mismo que había errado el penal fusilara a Long. Y todo eso pasó porque estábamos casi todos metidos dentro de nuestra área. El cuerpo técnico tendrá que buscarle la vuelta a este asunto porque ya nos ha costado varios goles.
Y ahí recién apareció el Rampla puntero. Recién ahí adelantamos las líneas. Y sin ser una gran cosa tuvimos un par de chances claras para empatar. A los 36´ una buena jugada por derecha de Barboza, Galo y Mezquida, terminó con un pase al medio de este último que el “Pájaro” Márquez empujó hacia el arco, con la mala suerte de que la guinda derivó justo para donde estaba el arquero. Sobre los 43´ otra vez el goleador del torneo tuvo el empate, desmarcándose tras un centro de Núñez y cabeceando la guinda hacia atrás, perdiéndose apenas afuera.
En el segundo tiempo ya fue todo más difícil porque Deportivo Maldonado se metió todo atrás y nos cerró los espacios por las bandas, obligándonos a centralizar el juego. Como se dice en la jerga futbolera "nos hizo entrar en el embudo".
Codevila intentó cambios ofensivos, colocando a Matías Rigoletto por Deleón, pasando a jugar con tres puntas. Y esa cuota de suerte que a veces es necesaria para destrabar este tipo de partidos nos fue esquiva, cuando un soberbio zurdazo de Mezquida entrando al área pegó en el palo, casi contra el ángulo, cuando iban 27 minutos y había tiempo para darlo vuelta.
En el último cuarto de hora fue más empuje que otra cosa. Entraron Jorge Anchén y Román Cuello por Galo y Mezquida pero poco pudieron hacer. Llegó el pitazo final de Martín Vázquez y nos perdimos la chance de sacar 8 puntos de ventaja en la tabla. Una parte de la parcialidad aplaudió al equipo, la otra se fue masticando bronca. No hace falta ser muy perspicaz para darse cuenta quienes eran los que fueron todo el campeonato.
Ahora es tiempo de pasar raya y hacer un balance, el cual, como decíamos al principio es claramente positivo. Sin embargo, estos últimos partidos han encendido algunas luces de alerta y sin duda habrá que trabajar mucho antes de encarar la segunda parte del torneo. La empezaremos en una posición inmejorable, ojalá la terminemos como todos queremos, festejando la vuelta de Rampla Juniors a Primera División. Salud!
martes, 24 de diciembre de 2013
viernes, 20 de diciembre de 2013
Todos tenemos que estar
Este sábado Rampla Juniors enfrenta a Deportivo Maldonado desde las 18 horas en el Parque Méndez Piana, con el arbitraje de Martín Vázquez, Antonio Fedorczuk y Gino Cottini. Gracias a las persistentes gestiones de nuestra Comisión Directiva a nivel de la AUF, se logró traer este partido a Montevideo, ya que el rival tenía la intención de jugarlo en Rocha, al no poder contar con ninguno de sus 2 escenarios habituales (Campus de Maldonado y Municipal de Pan de Azúcar).
Todos tenemos que estar en lo que será el último partido de nuestros primeros 100 años de vida. Esta vez no hay excusa, porque se juega de tarde, en fin de semana y con un clima perfecto para disfrutar de las actividades al aire libre. Pero más allá de eso, tenemos que estar para darle a este Rampla Juniors la despedida que merece. Este plantel y cuerpo técnico que nos devolvió la ilusión a todos. Este grupo que nos enorgullece por su garra y que nos deleita con sus pasajes de buen fútbol.
Hay que reconocerle a Bernardo Long sus atajadas imposibles y su tranquilidad digna de un arquero de 40 años, a los laterales su vocación ofensiva y su sobriedad en la marca, a los zagueros su fuerza para ir a buscar cada pelota y su personalidad para mandar desde el fondo, a los mediocampistas su ida y vuelta inclaudicable y su intención de jugar la pelota siempre al ras del césped, y a los delanteros sus goles, asistencias y solidaridad también para la marca. Y a todos los integrantes del plantel, que con más o menos minutos en cancha, han conformado un grupo que representa fielmente la mística ramplense.
También tenemos que estar para reconocerle al Cuerpo Técnico el trabajo serio y humilde que ha realizado, pese a las dificultades de que todos sabemos que hay. Y también a la Comisión Directiva, que si bien ha cometido errores en el pasado (los cuales han sido marcados oportunamente en este medio), ha hecho un gran esfuerzo por sostener económicamente la participación de nuestro equipo en este campeonato.
Tenemos que estar para demostrarle al fútbol uruguayo entero que el tercer grande está volviendo. Que el bravo Rampla está más vivo que nunca, y que en el año de nuestro centenario vamos a volver al lugar que nos pertence: la Primera División. Tenemos que estar para demostrar por qué somos la tercer hinchada del país, pese a que en los últimos años los resultados se hayan empecinado en privarnos de alegrías.
Para enfrentar a Deportivo Maldonado, Héctor Codevila confiará en los mismos once que comenzaron jugando la semana pasada ante Atenas de San Carlos: Bernardo Long, Diego Barboza, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Diego Galo, Sebastián Cessio, Ignacio Deleón, Nicolás Núñez, Andrés Márquez y Nicolás Mezquida. Julio Gutiérrez, Pablo Pereira y Gastón de los Santos siguen en sanidad y estarán en la tribuna, junto a los que queden fuera de la convocatoria.
Y también en la tribuna estará el trío que integra El Bravo Rampla, seguramente estará el popular “Paco” (a quien otra vez habrá que aclararle quien es Rampla y quien Deportivo Maldonado), el músico picapiedra Frank Lampariello y su frondosa barba, el gran comediante Marcel Keoroglián, y desde algún lugar también estarán Ricardo Espalter, Aníbal Durán del Campo, el gallego Muniz y tantos otros. Porque este sábado vamos a estar todos y va a ser una fiesta. Nuestra fiesta. Se vienen los 100 años, empecemos a festejar desde ahora. Salud viejo Rampla! Nos vemos en el Méndez Piana!
Todos tenemos que estar en lo que será el último partido de nuestros primeros 100 años de vida. Esta vez no hay excusa, porque se juega de tarde, en fin de semana y con un clima perfecto para disfrutar de las actividades al aire libre. Pero más allá de eso, tenemos que estar para darle a este Rampla Juniors la despedida que merece. Este plantel y cuerpo técnico que nos devolvió la ilusión a todos. Este grupo que nos enorgullece por su garra y que nos deleita con sus pasajes de buen fútbol.
Hay que reconocerle a Bernardo Long sus atajadas imposibles y su tranquilidad digna de un arquero de 40 años, a los laterales su vocación ofensiva y su sobriedad en la marca, a los zagueros su fuerza para ir a buscar cada pelota y su personalidad para mandar desde el fondo, a los mediocampistas su ida y vuelta inclaudicable y su intención de jugar la pelota siempre al ras del césped, y a los delanteros sus goles, asistencias y solidaridad también para la marca. Y a todos los integrantes del plantel, que con más o menos minutos en cancha, han conformado un grupo que representa fielmente la mística ramplense.
También tenemos que estar para reconocerle al Cuerpo Técnico el trabajo serio y humilde que ha realizado, pese a las dificultades de que todos sabemos que hay. Y también a la Comisión Directiva, que si bien ha cometido errores en el pasado (los cuales han sido marcados oportunamente en este medio), ha hecho un gran esfuerzo por sostener económicamente la participación de nuestro equipo en este campeonato.
Tenemos que estar para demostrarle al fútbol uruguayo entero que el tercer grande está volviendo. Que el bravo Rampla está más vivo que nunca, y que en el año de nuestro centenario vamos a volver al lugar que nos pertence: la Primera División. Tenemos que estar para demostrar por qué somos la tercer hinchada del país, pese a que en los últimos años los resultados se hayan empecinado en privarnos de alegrías.
Para enfrentar a Deportivo Maldonado, Héctor Codevila confiará en los mismos once que comenzaron jugando la semana pasada ante Atenas de San Carlos: Bernardo Long, Diego Barboza, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Diego Galo, Sebastián Cessio, Ignacio Deleón, Nicolás Núñez, Andrés Márquez y Nicolás Mezquida. Julio Gutiérrez, Pablo Pereira y Gastón de los Santos siguen en sanidad y estarán en la tribuna, junto a los que queden fuera de la convocatoria.
Y también en la tribuna estará el trío que integra El Bravo Rampla, seguramente estará el popular “Paco” (a quien otra vez habrá que aclararle quien es Rampla y quien Deportivo Maldonado), el músico picapiedra Frank Lampariello y su frondosa barba, el gran comediante Marcel Keoroglián, y desde algún lugar también estarán Ricardo Espalter, Aníbal Durán del Campo, el gallego Muniz y tantos otros. Porque este sábado vamos a estar todos y va a ser una fiesta. Nuestra fiesta. Se vienen los 100 años, empecemos a festejar desde ahora. Salud viejo Rampla! Nos vemos en el Méndez Piana!
lunes, 16 de diciembre de 2013
Brindaremos por el querido líder
A Rampla Juniors no le
quedó grande el traje de puntero y confirmó esa posición con una agónica
victoria 2 – 1 ante Atenas de San Carlos, que luego del empate de Rocha con
Huracán le permitió a los rojiverdes ampliar la ventaja en la cima de la tabla.
Pase lo que pase en la última fecha, el picapiedra querido terminará el año en la
primera posición de la tabla, y recibiremos nuestro centenario como líderes del
Campeonato Nacional de Ascenso. Si bien todos sabemos que
Rampla Juniors siempre tendría que estar en Primera División, por lo menos vamos a
cumplir los 100 años con la ilusión de que volver a la máxima categoría del
fútbol uruguayo es posible.
Estando a punto de terminar la primera mitad del torneo y
habiendo enfrentado a casi todos los rivales, podemos afirmar que este Rampla
es el mejor equipo de la divisional. Ha tenido partidos buenos
y malos, pero lo cierto es que ningún equipo demostró ser mejor que el
picapiedra. Ninguno lo superó futbolísticamente y solo uno lo derrotó
(Canadian), pero en esa ocasión los rojiverdes cayeron sin merecerlo y en
inferioridad numérica. Cuando el equipo de Codevila se enchufó y desplegó su
potencial, fue claramente el mejor de todos.
Ahora resta cerrar de
buena forma el año con un triunfo ante Deportivo Maldonado que nos permita
mantener o ampliar la ventaja, para encarar el año próximo con confianza y
tranquilidad para trabajar en busca del objetivo. Y será fundamental mantener
la conformación de este plantel, ya que todos han demostrado ser pilares en
este grupo que nos enorgullece a todos por su entrega y compromiso con la
causa.
Para enfrentar a Atenas
de San Carlos, Héctor Codevila repitió el equipo que triunfó en Rocha: Bernardo
Long, Diego Barboza, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón,
Diego Galo, Sebastián Cessio, Ignacio de León, Nicolás Núñez, Andrés Márquez y
Nicolás Mezquida.
El partido comenzó de la
mejor manera para Rampla. Una gran jugada colectiva a los 5 minutos les
permitió a los picapiedras ponerse en ventaja. Barboza avanzó por su lateral,
se la dio a Márquez que de cabeza puso en carrera a Galo, quien se metió solito
al área por derecha. Cuando todos esperábamos que Diego pateara, el morocho
tuvo la tranquilidad necesaria para frenarse, esperar, y cederle la guinda a
Mezquida, que entrando por el medio sacó un fuerte remate que se metió en el
ángulo del segundo palo. Un golazo.
A partir de ahí, el
rojiverde se quedó. Le cedió la cancha a Atenas, que abriendo las bandas y
llegando con mucha gente nos arrinconó contra el arco de Long, que como es
habitual respondió con absoluta seguridad, si bien ninguna chance de los
visitantes fue clara. Recién a los 40´ Rampla pudo liquidarlo con una buena
contra entre Mezquida y Márquez, que terminó con un remate del “pájaro” que
casi se mete contra el palo, obligando una buena intervención del arquero
rival.
Para la segunda parte,
estaba claro que para poner a resguardo el resultado Rampla necesitaba otro
gol, porque Atenas iba con mucha gente a buscar el empate, nos complicaba
llegando por los costados y quedaba bastante expuesto para el contragolpe
rojiverde. Casi lo liquidamos a los 13´, con un centro de Barboza que Márquez
bajó sobre el segundo palo, luego la cedió atrás a Mezquida, que no fue egoísta
y se la sirvió a Núñez que entraba solito por el medio. Niki sacó un furibundo
remate que el arquero sacó al córner.
De lado nuestro seguíamos
sufriendo, porque los visitantes nos tenían acorralados y si bien la pareja
central y fundamentalmente Long estuvieron impecables, era demasiado riesgoso
dejar que los carolinos llegaran con pelota dominada hasta tan cerca de nuestro
arco. Muestra clara de ello fue a los 22´,
cuando Galo por error cabeceó contra la propia meta y la guinda besó el
travesaño. Como sucede desde que el fútbol es fútbol: todos sabemos que un gol
no es diferencia.
Tuvimos para liquidarlo
otra vez a los 29´, gracias a una avivada de Mezquida, que intuyó que un
zaguero rival se la iba a pasar a su golero con la cabeza, interceptó la pelota
y la tocó rápidamente por encima del guardameta, perdiéndose la guinda apenas
por arriba del palo. Después Codevila intentó refrescar el equipo, dando
ingreso a Anchén y Dzeruvs por Núñez y Mezquida, pero el trámite no cambió.
Y cuando todo pintaba
para que termináramos sufriendo y pidiendo la hora, como se podría decir
estamos acostumbrados los parciales rojiverdes, llegó el empate de Atenas. Iban
40 minutos cuando vino un centro desde la punta de Sassón y un delantero
cabeceó totalmente desmarcado, colocando la guinda contra un palo y dejando sin
asunto a Long. Rampla pagaba el precio de haberse tirado demasiado atrás y no
haber estado fino en la definición para meter otro gol.
Ante ese panorama, los
últimos minutos se volvieron muy emocionantes y la victoria podía ser para
cualquiera. Entonados por la igualdad, los de Maldonado siguieron yendo al
frente y casi lo dan vuelta tras una pelota que vino de izquierda a derecha y
encontró a un futbolista carolino entrando solo por el segundo palo, que le
pegó fuerte y al medio pero Long otra vez desactivó el peligro. Y en la recarga
llegaría la jugada que derivaría en el córner donde Rampla convertiría el tanto
de la victoria.
Paul Dzeruvs se fue solo
contra el mundo y ante un par de rivales que lo acechaban se hizo un espacio
para rematar de zurda, obligando al arquero a sacarla por arriba del palo. En
ese córner vino el centro que Ale Rodríguez peinó en el primer poste y dejó
solo a Márquez, con la mala suerte para el “pájaro” que la pelota le quedó algo
atrás y no le pudo pegar bien. Sin embargo, para
sorpresa de todos, la guinda tomó vuelo y con un efecto extraño confundió al
arquero de Atenas, que cuando quiso reaccionar ya la vio en el fondo de la red.
Un gol rarísimo, pero sumamente festejado por jugadores, cuerpo técnico y
parcialidad. Todos explotamos en un desahogo merecido, más allá de lo mostrado
en este partido en particular, por la soberbia campaña que están realizando
nuestros jugadores. Ellos, más que nadie, se merecían mantener la punta del
campeonato.
Grandes grupos consiguen
grandes cosas. Cuando la interna está "podrida", en la cancha las pelotas que deberían
entrar no entran, y al revés, cuando puertas adentro el grupo está fuerte y
unido, esa convicción muchas veces logra
torcer el destino de un partido. Es lo que tiene este Rampla. Siempre intenta jugar bien, de la mano de un cuerpo técnico que pregona eso, pero cuando no se puede o el buen juego no alcanza, aparece esa entrega "extra" que hay que tener cuando se lleva la camiseta de Rampla puesta.
Ojalá para el año que
viene se pueda mantener este plantel. Sabemos que a más de uno lo vendrán a
buscar y que como profesionales que son tienen todo su derecho a querer
progresar, pero esperemos que se aguanten unos meses más y puedan concretar
esta gran campaña, dejando a nuestro querido Rampla en Primera División. Si eso
ocurre, entrarán en la historia de nuestro prestigioso club, lo cual no es
poco, porque la gloria no se puede comprar. Arriba el bravo Rampla!
Comentario: Mr.Baru (@crearoreventar)
Fotos: Adrián Barreto (@adribarreto90)
jueves, 12 de diciembre de 2013
¡Arriba Rampla! ¡Arriba de todos!
¡Qué lindo es mirar la
tabla y ver al bravo Rampla en la cima! Los rojiverdes habían dejado pasar la
chance de subirse a la punta cuando perdieron con Canadian, pero se hicieron
fuertes en la adversidad y lograron un triunfazo en Rocha, quitándole la punta
a los celestes. Un resultado que sin duda marca que a nuestro plantel le podrán
faltar muchas cosas, pero le sobra personalidad y entrega.
El resultado es muy
importante por donde se lo mire. Después de perder el invicto, el partido
siguiente era clave. Y más aún tratándose de jugar contra el líder del torneo,
y de visitante, y con la chance de “robarle” la primera posición. Era una final
y los muchachos la jugaron como tal. Aprovecharon el penal convertido por el “Pájaro”
Márquez y defendieron con garra y corazón la diferencia, pese a que también pudieron
aumentarla sobre el final. Desde el triunfo en la
primera fecha ante Central que Rampla no terminaba un partido con el
arco en cero.
(foto elascenso.com)
Los dirigidos por Héctor Codevila salieron a la cancha con Bernardo Long, Diego Barboza, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Diego Galo, Sebastián Cessio, Ignacio de León, Nicolás Núñez, Andrés Márquez y Nicolás Mezquida. Barboza entró por el suspendido Vargas y el “Pájaro” volvió tras cumplir la sanción por ver la roja frente a Huracán. El otro cambio fue táctico: Galo, futbolista de más marca, por Carballo.
Los dirigidos por Héctor Codevila salieron a la cancha con Bernardo Long, Diego Barboza, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Diego Galo, Sebastián Cessio, Ignacio de León, Nicolás Núñez, Andrés Márquez y Nicolás Mezquida. Barboza entró por el suspendido Vargas y el “Pájaro” volvió tras cumplir la sanción por ver la roja frente a Huracán. El otro cambio fue táctico: Galo, futbolista de más marca, por Carballo.
El primer tiempo fue
parejo, ambos contaron con chances de abrir el marcador y tuvieron a sus
arqueros como buenas figuras. La mejor de Rampla fue sobre la media hora, un
remate de Nicolás Núñez desde la medialuna que Barlocco, el ex portero
rojiverde, sacó del ángulo. A los rojiverdes se los vio bien en el manejo de la
pelota, pero carecieron de precisión y profundidad en los últimos metros de la
cancha. Y tuvieron esa cuota de suerte siempre necesaria cuando un cabezazo de un delantero rochense, luego de una soberbia atajada de Long, besara el travesaño y se perdiera afuera.
En el complemento se
produjo la jugada que marcaría un quiebre en el partido. Un tiro de Márquez
rebotó en un defensa rival y el juez Oscar Rojas entendió que hubo mano
intencional en la incidencia, sancionando la pena máxima. Lo cierto es que por
televisión no pareció penal y los periodistas rochenses se enojaron bastante. Poco
le importó al “Pájaro”, que lo transformó en gol y así sumó su décima conquista
en igual cantidad de partidos.
De ahí al final hubo que
sufrir. Rocha pasó a jugar con línea de 3 en defensa y 3 delanteros. Tuvieron
alguna chance malograda por mala puntería o por buenas intervenciones de Long.
También reclamaron un penal de Canosa que no existió.
Rampla lo pudo liquidar
de contra varias veces. Primero se lo perdió Mezquida mano a mano con Barlocco, rematando afuera cuando Márquez le pedía el pase al medio. Después Nico escapó por la punta y por el centro
entraban Márquez, De León y Núñez. Mezquida esta vez la metió al medio, pero la guinda rebotó en
un defensa rochense y cuando se metía en el arco, casi de milagro, Martín
Barlocco la sacó al córner con el hombro. Después Codevila movió el banco para
consumir minutos. Entraron Carballo por Núñez y Dzeruvs por Mezquida.
Llegó el pitazo final y
el festejo de la parcialidad picapiedra, que se acercó en buen número al Mario
Sobrero, pese a la distancia y a que el partido se jugaba en un día laborable.
Rampla llegó a la punta del torneo y ahora deberá defenderla con todo.
El sábado tenemos otra
final contra Atenas, que viene tercero a 3 puntos y en una racha de 4 victorias
consecutivas. Otra oportunidad para seguir demostrando que el bravo Rampla está
para campeón. El partido se jugará a las 10:10 hrs. en el Estadio Olímpico. ¡Allí
estaremos! ¡Arriba Rampla!
miércoles, 11 de diciembre de 2013
Por la puerta grande
Nuestras divisiones juveniles, pese a haber finalizado en la
primera ubicación en la tabla general acumulada del Campeonato Uruguayo de
Segunda División, no pudieron conseguir el ascenso.
Se disputó una liguilla de seis equipos (los mejores
ubicados en la tabla acumulada) en la cual Rampla finalizó en la última
ubicación y por ende no ascendió a primera. Aquellos equipos que consiguieron
el ascenso fueron Deportivo Maldonado, Cerro Largo y Bella Vista.
La chance era inmejorable para que nuestros juveniles
pudieran competir al más alto nivel. La realidad indica que, pese a que se ha
mejorado en esta materia con respecto a años anteriores, no alcanzó para seguir
trabajando.
Desde este medio, queremos saludar a todos aquellos que
trabajan en esta área (jugadores, allegados, dirigentes, cuerpo técnico, etc.).
Sabemos que es un trabajo duro, más aún en el marco de un club con problemas
económicos, y es por esto que esa labor merece ser destacada pese a que no se
logre el objetivo planteado. ¡No queda más remedio que seguir trabajando!
Recibimos y
Publicamos
Un grupo de jugadores de nuestras divisiones juveniles, más
precisamente aquellos que con edad de segundo año de 4ta. división nos
manifestaron su preocupación por la falta de oportunidad y consideración que
tuvieron en el club de forma de seguir vinculado al mismo. Dada la edad, este
grupo de jugadores, finalizó su actividad en divisiones juveniles (logrando campeonatos
el pasado año y este) y es por esto que reclaman –justamente– ser considerados
para integrar el plantel de primera.
Sin querer meternos en el manejo de planteles y temas
económicos, es lindo saber que hay gurises que jugaron y quieren jugar en
Rampla. Entendemos que en una época donde lo económico es un gran problema, se
debería considerar –al menos para tener una oportunidad de probarse– a pibes que han sabido defender de gran manera
a nuestra querida institución.
lunes, 9 de diciembre de 2013
La tarde menos pensada
Consumada la derrota de Rocha en la mañana, Rampla tenía la chance de alcanzar la punta del campeonato con apenas un empate frente a Canadian, lo cual no parecía para nada imposible teniendo en cuenta el escaso potencial del rival y fundamentalmente que los rojiverdes venían invictos en el torneo. Sin embargo, el equipo picapiedra jugó su peor partido y perdió 1 a 0 ante los “canadienses”.
Si bien la expulsión de Fabián Vargas condicionó a Rampla para el resto del partido y el gol de Canadian llegó cuando los rojiverdes jugaban con 10 hombres, el partido se perdió por lo no hecho cuando se estaba 11 contra 11. Fueron casi 60 minutos donde los ramplenses no crearon una sola chance de gol. Apenas tuvieron un tiro de Mezquida de 40 metros que complicó al arquero con el pique, y un tiro libre de Ignacio De León que obligó a una buena intervención del guardameta local. Nada más.
Es cierto que Canadian tampoco hizo mucho, pero aquí el candidato a ascender es Rampla. El que tiene la obligación de demostrar cada partido por qué quiere estar en Primera es Rampla Juniors. No importa que haga calor, no importa que la cancha sea un DE-SAS-TRE como el otro día. Los rojiverdes tienen que hacer valer su superioridad, porque a nadie le quedan dudas que Rampla es más que Canadian.
Somos conscientes de las dificultades que afronta nuestro plantel. Que no tienen médico, que a veces no practican porque no hay leña para la caldera que calienta el agua de los vestuarios, que no están al día, etc. Y si tenemos en cuenta esas condiciones, es un CAMPEONATAZO el que se están mandando nuestros jugadores. Por eso, más allá de la derrota, tuvieron el merecido apoyo de la hinchada al final del partido.
Pero también hay que reconocer que el rendimiento de los dirigidos por Héctor Codevila se ha venido a menos en los últimos partidos. Esto es una realidad. Seguramente el cuerpo técnico y los jugadores son conscientes de ello. Y no les estamos pidiendo algo que ya no hayan hecho. Sabemos que este equipo puede dar mucho más que lo mostrado el otro día en el Obdulio Varela. Quizás esta derrota haya llegado en el momento justo, a modo de llamado de atención.
Yendo al partido en sí, hay muy poco para decir. Rampla salió a la cancha con Bernardo Long, Fabián Vargas, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Agustín Carballo, Sebastián Cessio, Ignacio De León, Nicolás Núñez, Nicolás Mezquida y Román Cuello. De los habituales titulares estuvieron ausentes Julio Gutiérrez, Pablo Pereira, Jorge Anchén y el goleador Andrés Márquez.
En el primer tiempo no pasó nada. Asistimos a un sinfín de impresiciones, digno de un partido de pretemporada. Canadian tuvo la única clara, tras un tiro de esquina que peinaron en el primer palo y el futbolista que entró por el segundo se llevó la pelota por delante, obligando a una gran reacción de Long, que pudo sacarla con el pie. De Rampla solo los 2 tiros lejanos señalados al principio de esta crónica.
En la segunda parte se mantuvo la tónica, hasta el minuto 13 cuando se produce un quiebre en el partido: la expulsión de Vargas. Tras una pelota aérea lejos del área, el “Coto” y Canosa chocaron entre ellos y con un delantero rival, con la mala suerte de que la guinda quedó a merced del atacante, que se iba solo para el arco cuando Vargas lo taló de atrás. Roja indiscutible. Es cierto, en el primer tiempo hubo una falta sobre Mezquida de un futbolista que también era último hombre, pero en ese caso fue más un choque que una falta intencional en sí, y además Nico se iba por la punta, no directo al arco. Esa era discutible, la del “Coto” era roja por donde se la mire.
De todos modos, más allá de la expulsión, lo que también terminó perjudicando a Rampla fue el cambio que hizo Codevila, sacando a Román Cuello para reforzar el lateral derecho con Diego Barboza. De esa forma, los rojiverdes perdieron peso en ofensiva y además le dieron más libertad al rival para adelantarse en la cancha. A tal punto que pocos minutos después llegó el gol definitivo. Sassón no pudo rechazar y nos entraron por la izquierda. Vino el pase al medio, un remate que se iba afuera rebotó en Canosa y le quedó servida a un delantero rival, que la puso contra el palo.
A los 19 minutos, Rampla tenía un hombre menos, perdía 1 a 0 y tenía poca presencia ofensiva. Codevila mandó enseguida a Paul Dzeruvs por De León y luego a Matías Choca por Carballo, pero al no tener una referencia de área, los ataques picapiedras morían en tímidos intentos de media distancia o en centros sin riesgo que eran despejados por la defensa rival. Lo único que podía ilusionarnos era una pelota quieta y así fue que casi lo empatamos en los descuentos.
Canosa, de gran rendimiento, se vistió de centro delantero para intentar meterla de “emboquillada” en la segunda pelota luego de un córner. No se sabe cómo el arquero de Canadian la manoteó, y cuando la guinda quedó boyando en la línea de gol ellos pudieron sacarla del estadio. Los jugadores picapiedras reclamaron que esa pelota había entrado pero el línea no consideró lo mismo.
Terminó el partido y se consumó la primera derrota de Rampla Juniors en la temporada, seguramente la menos pensada y como decíamos antes, un llamado de atención. Hay que recuperar el rendimiento de los primeros partidos y corregir errores. Recordemos que una equivocación del “Pájaro” Márquez ante Huracán lo dejó afuera de este partido, y quizás con el goleador la historia hubiera sido distinta.
Falta mucho y seguimos esperanzados en este plantel, pero no hay que confiarse. Hay que jugar cada partido como una final. En la medida que estamos arriba, más a muerte nos van a jugar los rivales. Quedó claro que, al final del partido, para los de Canadian fue casi que un “maracanazo” ganarle al picapiedra. Seamos conscientes de esa responsabilidad. Del peso que tiene la camiseta de Rampla en el fútbol uruguayo. No regalemos ni un centímetro, y vamos a volver a Primera porque tenemos con qué hacerlo. Arriba Rampla!
Si bien la expulsión de Fabián Vargas condicionó a Rampla para el resto del partido y el gol de Canadian llegó cuando los rojiverdes jugaban con 10 hombres, el partido se perdió por lo no hecho cuando se estaba 11 contra 11. Fueron casi 60 minutos donde los ramplenses no crearon una sola chance de gol. Apenas tuvieron un tiro de Mezquida de 40 metros que complicó al arquero con el pique, y un tiro libre de Ignacio De León que obligó a una buena intervención del guardameta local. Nada más.
Es cierto que Canadian tampoco hizo mucho, pero aquí el candidato a ascender es Rampla. El que tiene la obligación de demostrar cada partido por qué quiere estar en Primera es Rampla Juniors. No importa que haga calor, no importa que la cancha sea un DE-SAS-TRE como el otro día. Los rojiverdes tienen que hacer valer su superioridad, porque a nadie le quedan dudas que Rampla es más que Canadian.
Somos conscientes de las dificultades que afronta nuestro plantel. Que no tienen médico, que a veces no practican porque no hay leña para la caldera que calienta el agua de los vestuarios, que no están al día, etc. Y si tenemos en cuenta esas condiciones, es un CAMPEONATAZO el que se están mandando nuestros jugadores. Por eso, más allá de la derrota, tuvieron el merecido apoyo de la hinchada al final del partido.
Pero también hay que reconocer que el rendimiento de los dirigidos por Héctor Codevila se ha venido a menos en los últimos partidos. Esto es una realidad. Seguramente el cuerpo técnico y los jugadores son conscientes de ello. Y no les estamos pidiendo algo que ya no hayan hecho. Sabemos que este equipo puede dar mucho más que lo mostrado el otro día en el Obdulio Varela. Quizás esta derrota haya llegado en el momento justo, a modo de llamado de atención.
Yendo al partido en sí, hay muy poco para decir. Rampla salió a la cancha con Bernardo Long, Fabián Vargas, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Agustín Carballo, Sebastián Cessio, Ignacio De León, Nicolás Núñez, Nicolás Mezquida y Román Cuello. De los habituales titulares estuvieron ausentes Julio Gutiérrez, Pablo Pereira, Jorge Anchén y el goleador Andrés Márquez.
En el primer tiempo no pasó nada. Asistimos a un sinfín de impresiciones, digno de un partido de pretemporada. Canadian tuvo la única clara, tras un tiro de esquina que peinaron en el primer palo y el futbolista que entró por el segundo se llevó la pelota por delante, obligando a una gran reacción de Long, que pudo sacarla con el pie. De Rampla solo los 2 tiros lejanos señalados al principio de esta crónica.
En la segunda parte se mantuvo la tónica, hasta el minuto 13 cuando se produce un quiebre en el partido: la expulsión de Vargas. Tras una pelota aérea lejos del área, el “Coto” y Canosa chocaron entre ellos y con un delantero rival, con la mala suerte de que la guinda quedó a merced del atacante, que se iba solo para el arco cuando Vargas lo taló de atrás. Roja indiscutible. Es cierto, en el primer tiempo hubo una falta sobre Mezquida de un futbolista que también era último hombre, pero en ese caso fue más un choque que una falta intencional en sí, y además Nico se iba por la punta, no directo al arco. Esa era discutible, la del “Coto” era roja por donde se la mire.
De todos modos, más allá de la expulsión, lo que también terminó perjudicando a Rampla fue el cambio que hizo Codevila, sacando a Román Cuello para reforzar el lateral derecho con Diego Barboza. De esa forma, los rojiverdes perdieron peso en ofensiva y además le dieron más libertad al rival para adelantarse en la cancha. A tal punto que pocos minutos después llegó el gol definitivo. Sassón no pudo rechazar y nos entraron por la izquierda. Vino el pase al medio, un remate que se iba afuera rebotó en Canosa y le quedó servida a un delantero rival, que la puso contra el palo.
A los 19 minutos, Rampla tenía un hombre menos, perdía 1 a 0 y tenía poca presencia ofensiva. Codevila mandó enseguida a Paul Dzeruvs por De León y luego a Matías Choca por Carballo, pero al no tener una referencia de área, los ataques picapiedras morían en tímidos intentos de media distancia o en centros sin riesgo que eran despejados por la defensa rival. Lo único que podía ilusionarnos era una pelota quieta y así fue que casi lo empatamos en los descuentos.
Canosa, de gran rendimiento, se vistió de centro delantero para intentar meterla de “emboquillada” en la segunda pelota luego de un córner. No se sabe cómo el arquero de Canadian la manoteó, y cuando la guinda quedó boyando en la línea de gol ellos pudieron sacarla del estadio. Los jugadores picapiedras reclamaron que esa pelota había entrado pero el línea no consideró lo mismo.
Terminó el partido y se consumó la primera derrota de Rampla Juniors en la temporada, seguramente la menos pensada y como decíamos antes, un llamado de atención. Hay que recuperar el rendimiento de los primeros partidos y corregir errores. Recordemos que una equivocación del “Pájaro” Márquez ante Huracán lo dejó afuera de este partido, y quizás con el goleador la historia hubiera sido distinta.
Falta mucho y seguimos esperanzados en este plantel, pero no hay que confiarse. Hay que jugar cada partido como una final. En la medida que estamos arriba, más a muerte nos van a jugar los rivales. Quedó claro que, al final del partido, para los de Canadian fue casi que un “maracanazo” ganarle al picapiedra. Seamos conscientes de esa responsabilidad. Del peso que tiene la camiseta de Rampla en el fútbol uruguayo. No regalemos ni un centímetro, y vamos a volver a Primera porque tenemos con qué hacerlo. Arriba Rampla!
viernes, 6 de diciembre de 2013
Rampla debuta ante los canadienses
Mientras siguen las repercusiones del sorteo del Mundial Brasil 2014, el fútbol uruguayo retoma su actividad este fin de semana y Rampla Juniors enfrentará por primera vez en su historia al equipo de Canadian. Será en el Estadio Obdulio Varela a partir de las 18 horas. Los rojiverdes están a 1 unidad del líder Rocha, y pueden pasar a la cima de confirmarse que ganarán los puntos del partido contra Plaza Colonia. El fallo se haría oficial la semana que viene.
Los dirigidos por Héctor Codevila tendrán ausencias importantes para el choque ante el peculiar equipo “canadiense” (fundado y financiado por uruguayos residentes en aquel país del Norte). No estarán el goleador Andrés Márquez (suspendido) ni el zaguero Pablo Pereira (lesionado). Otro que está en duda es Jorge Anchén, que al igual que Pereira debió salir lesionado durante el partido pasado frente a Huracán, que terminara con empate 1 a 1.
Ante este panorama, los once picapiedras que el entrenador elegiría para enfrentar a Canadian serían Bernardo Long, Diego Barboza, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Jorge Anchén, Sebastián Cessio, Ignacio De León, Nicolás Núñez, Román Cuello y Nicolás Mezquida.
Mientras Rampla sigue invicto en el torneo, con 5 victorias y 4 empates, Canadian viene de sufrir su cuarta derrota: 0-3 frente a Boston River. Los “canadienses” han tenido una campaña irregular y hoy ocupan la 10ma. posición en la tabla. Indudablemente los picapiedras son favoritos, pese a jugar en un campo de juego que sabemos no está en buenas condiciones, pero los partidos hay que jugarlos.
El partido comenzará a las 18 horas, una hora más tarde del horario que se venía utilizando hasta ahora. Los jueces serán Javier Bentancor, Robert Muniz y Juan Guevara. Se disputará en el Obdulio Varela, campo propiedad de Villa Española. Para llegar desde la Villa sirven el 195 y el 306. La última vez que Rampla viajó hasta allá se quedó con la victoria. Fue este año, pero por la temporada pasada, 2-1 sobre Torque con goles de Luis Martínez y Joaquín Noy. Ojalá que el triunfo se repita. Arriba Rampla!
Los dirigidos por Héctor Codevila tendrán ausencias importantes para el choque ante el peculiar equipo “canadiense” (fundado y financiado por uruguayos residentes en aquel país del Norte). No estarán el goleador Andrés Márquez (suspendido) ni el zaguero Pablo Pereira (lesionado). Otro que está en duda es Jorge Anchén, que al igual que Pereira debió salir lesionado durante el partido pasado frente a Huracán, que terminara con empate 1 a 1.
Ante este panorama, los once picapiedras que el entrenador elegiría para enfrentar a Canadian serían Bernardo Long, Diego Barboza, Alejandro Rodríguez, Rodrigo Canosa, Salvador Sassón, Jorge Anchén, Sebastián Cessio, Ignacio De León, Nicolás Núñez, Román Cuello y Nicolás Mezquida.
Mientras Rampla sigue invicto en el torneo, con 5 victorias y 4 empates, Canadian viene de sufrir su cuarta derrota: 0-3 frente a Boston River. Los “canadienses” han tenido una campaña irregular y hoy ocupan la 10ma. posición en la tabla. Indudablemente los picapiedras son favoritos, pese a jugar en un campo de juego que sabemos no está en buenas condiciones, pero los partidos hay que jugarlos.
El partido comenzará a las 18 horas, una hora más tarde del horario que se venía utilizando hasta ahora. Los jueces serán Javier Bentancor, Robert Muniz y Juan Guevara. Se disputará en el Obdulio Varela, campo propiedad de Villa Española. Para llegar desde la Villa sirven el 195 y el 306. La última vez que Rampla viajó hasta allá se quedó con la victoria. Fue este año, pero por la temporada pasada, 2-1 sobre Torque con goles de Luis Martínez y Joaquín Noy. Ojalá que el triunfo se repita. Arriba Rampla!
lunes, 2 de diciembre de 2013
Una mañana complicada
Rampla Juniors empató 1 a
1 con Huracán en el Estadio Olímpico y perdió la chance de subirse a la punta
del campeonato, luego de que Rocha perdiera el invicto en su casa ante
Progreso, que venía último en la tabla de posiciones. De todos modos, los
rojiverdes se mantienen en la segunda posición y ahora se acercaron 1 punto más
a los rochenses. Además, los dirigidos por Héctor Codevila son los únicos
invictos del campeonato.
Los picapiedras, si bien comenzaron
ganando con un gol de penal de Andrés Márquez, tuvieron una mañana complicada.
Perdieron dos jugadores por lesión y luego al goleador por expulsión. Con un
hombre de menos hicieron lo que pudieron por sostener el resultado, pero una
falla defensiva le permitió a los visitantes llevarse un punto de nuestra casa.
A los lesionados que ya
tenía Codevila en el plantel (Fabián Vargas, Enzo Ventoso, Julio Gutiérrez y
Gastón de los Santos) durante el partido se le sumaron Jorge Anchén y Pablo
Pereira. De todos modos, los que ingresaron ante Huracán (Agustín Carballo y
Alejandro Rodríguez) lo hicieron en buena forma, demostrando el nivel
competitivo que tienen todos los futbolistas que integran nuestra plantilla.
El problema, es que los
cambios obligados le impidieron a Codevila utilizar las variantes para buscar
modificar el curso del partido. La única que pudo realizar con ese fin fue
cuando le dio ingreso a Mezquida por Román Cuello, cuando ya Rampla estaba con
10 jugadores y Nico prácticamente que quedó solo contra el mundo en ofensiva.
Repasando el partido, justo
es decir que Rampla no jugó bien. Los primeros minutos la pelota la tuvo
Huracán, aunque no inquietó mucho el arco custodiado por Bernardo Long. Hubo un
remate desde la medialuna a los 7´ que se fue afuera y poco más. Principalmente
las oportunidades de los visitantes fueron por el juego aéreo y siempre
encontraron la seguridad de Bernardo bajo los tres palos.
Promediando la mitad
inicial los rojiverdes emparejaron y comenzaron a adueñarse del balón. Como
estaba planteado el trámite, la diferencia a favor de uno u otro equipo iba a
darse cuando alguno se equivocara y el que falló fue Huracán. Un defensor
empujó claramente a Márquez dentro del área y el juez no dudó en sancionar la
pena que el propio “pájaro” transformó en gol. Así nos fuimos al descanso.
El complemento se
mostraba propicio para que Rampla pudiera liquidarlo de contragolpe, poniendo
jugadores frescos en ofensiva, pero ya de entrada Codevila tuvo que realizar su
segundo cambio obligado, colocando a Ale Rodríguez por Pereira. El zaguero
surgido en Nacional y que ya jugara en Rampla en la era Castelnoble hizo su
debut esta temporada y respondió en buena forma.
Y la gran complicación
fue la tonta expulsión de Márquez a los 12 minutos. El “pájaro”, que ya tenía
amarilla por protestar, reventó para la tribuna una pelota que ya estaba afuera
y el juez lo expulsó por doble amarilla. Nada que reprocharle al árbitro y
tampoco a Márquez, que es uno de los grandes artífices de la campaña picapiedra
con 9 goles en 9 partidos. Eso si, este tipo de errores no se pueden volver a
cometer.
Con un hombre menos
Rampla debió cederle campo y balón a Huracán, y los dirigidos por Miguel Puppo
sin ser gran cosa llegaron al empate cuando iban 30 minutos. Diego Barboza (que
jugó como lateral derecho en lugar de Vargas) salió al cruce y quedó por el
camino, vino el pase al medio y en el corazón del área un futbolista visitante
tuvo todo el tiempo del mundo para pararla y fusilar a Long.
De ahí al final los
ánimos picapiedras estaban divididos entre la gente que quería arriesgar para
ir por el triunfo y los que entendíamos que en las circunstancias planteadas,
el empate no era un mal resultado, ya que nos permitía mantener el invicto y
seguir arriba de Huracán en la tabla.
Increíblemente, pudimos
ganarlo a los 38 minutos. Tras un pase atrás de un compañero, el arquero de
Huracán cometió la tontería de tomar la pelota con las manos. El juez sancionó
la falta técnica y más rápido que todos, Nicolás Núñez apoyó la guinda en el
césped y la tocó para Mezquida, que la empujó hacia el arco. Era gol de Rampla
pero el juez lo anuló, argumentando que no había dado la orden. Una incidencia
realmente polémica y muy discutible.
Así llegamos al pitazo
final y se consumó el empate, la tercera igualdad consecutiva de Rampla jugando
como local en el Estadio Olímpico, lo cual demuestra que ganar en casa es el
gran debe que tiene nuestro equipo, que ha sido implacable jugando como
visitante, triunfando en los 3 juegos que disputó en esa condición.
De todos modos, cuando no
se puede ganar no hay que perder, y menos cuando se trata de partidos contra
rivales directos. Rampla ha demostrado ser el equipo más regular y sin dudas
mantener esa regularidad es la clave para conseguir el objetivo. Hay que seguir
jugando cada partido como si fuera una final y minimizando los errores, nos
vamos expresos a Primera. Arriba Rampla!
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