Pitó el árbitro. Terminó el partido y
también el año para Rampla Juniors. Un año que comenzó con la ilusión de seguir
en Primera y termina con nuestro equipo sumergido en el último lugar de la
Segunda División. Ya habrá tiempo para analizar las causas de semejante
debacle. Eso sí, hay que tener autocrítica y no echarle la culpa a la mala
suerte. El próximo martes se realizará una Asamblea de Socios en nuestra sede y
la Comisión Directiva deberá asumir su responsabilidad en esta grave crisis
deportiva.
El partido contra Atenas fue un reflejo de
lo que fue Rampla en este torneo. Un equipo impreciso, que pierde muchísimos
balones y llega poco al área rival, que además cuando logra hacerlo no define
en buena forma. Entonces con el paso de los minutos, cuando el gol no llega, el
nerviosismo gana a nuestros jugadores y comienzan a aparecer espacios que los
rivales no tardan en capitalizar.
Esto ocurrió pese a que el planteo del
“Ronco” López fue ofensivo, con un mediocampo poblado por jugadores de buen
pie. Los once que salieron al campo fueron Martín Barlocco, César Vargas,
Alvaro Márquez, Federico Velázquez, Emanuel Cuello, Darío Flores, Sebastián
Cessio, Maureen Franco, Ignacio De León, Leonardo Medina y Paul Dzeruvs. En el
centro del campo se formaba un rombo, con Cessio como volante central, Flores
por derecha, Franco por izquierda y De León como enganche.
El más claro parecía ser el argentino De
León. Era el que manejaba mejor la pelota, el que no se desesperaba y se tomaba
el tiempo para encontrar a un compañero bien ubicado. Así fue a los 4 minutos,
cuando le puso la pelota en el área a Medina, que luego de forcejear con un
rival sacó un remate de zurda que pegó en el vertical izquierdo del arco del
barco.
A los 12´ fue el propio Nacho De León,
quien llegó a las puertas del área dribleando rivales y sacó un remate que se
perdió cerca. El que estaba muy lejos del área era Maureen Franco, volcado por
izquierda y metiendo pases largos. Sobre los 28´ metió una buena bocha para
Paul Dzeruvs, que escapó en velocidad y perdió el mano a mano con el arquero.
El juvenil delantero adelantó demasiado la pelota y no tuvo espacio para
definir bien.
La primera llegada seria de Atenas fue un
minuto después, tras un tiro de esquina, le pelota quedó boyando en el área y
un rival sacó un puntazo que pegó en el travesaño. La segunda fue a los 40´,
donde Martín Barlocco se lució sacando al córner una pelota que se metía abajo
contra un palo. Lamentablemente de nada sirvió porque luego de ese tiro de
esquina llegaría el gol de los carolinos. Centro, despeje de la defensa, otro
centro más y el cómodo cabezazo de un ateniense en el segundo palo. Barlocco
estaba sobre el primer poste y la defensa perdió la marca de un futbolista que
cabeceó completamente solo.
Así llegamos al final del Primer Tiempo.
Rampla se iba perdiendo al descanso sin merecerlo, como en tantos otros
partidos de este campeonato. En un trámite parejo, los rivales son letales en
sus avances y nosotros parece que precisamos jugar un año para hacer un gol. La
misma película de todo el campeonato.
Para el complemento el “Ronco” López hizo 3
cambios. Mostrando su evidente disconformidad con lo mostrado por el equipo.
Ingresaron Rodrigo Álvez, Diego Ventoso y el colombiano Óscar Arce, saliendo
Alvaro Marquez, Darío Flores y Nacho De León. De este último no entendimos
su salida, ya que a nuestro criterio era la manija del equipo y el que le daba
más claridad al juego. Así Rampla pasó a jugar con 3 hombres en el fondo, 4
volantes y 3 delanteros. Era fundamental asumir riesgos y atacar con todo.
De todas formas, la ofensividad del planteo
no se vio reflejada en los hechos. El picapiedra siguió perdiendo infinidad de
balones en el mediocampo y el equipo quedó partido al medio. Atenas comenzó a
defenderse con la pelota, tocando y tocando, y los rojiverdes no podían hacerse
con el balón.
De todo el segundo tiempo apenas podemos
destacar la entrega de Paul Dzeruvs y César Vargas. Paul metiendo y metiendo
casi clava el empate a los 15 minutos, solo por el mérito de luchar una pelota que
había quedado boyando en el área. Un defensa rechazó hacia atrás, el arquero
salió lejos y no pudo hacerse con el esférico, allí Paul remató varias veces
pero la pelota siempre rebotaba en los rivales. El último de ellos la sacó de
cabeza desde la línea de gol.
Vargas por su parte, pese a que muchas
veces fue impreciso en los pases, era el único que corría y corría “apagando
incendios” en la defensa, y fue junto a Barlocco el responsable de que los
visitantes no aumentaran la diferencia.
Dentro de este panorama, la única chance de
empatar parecía ser a través de una pelota quieta. Y allí fue cuando apareció
otra vez la mala suerte. A los 34´ Franco le pegó notable a un tiro libre, el
arquero la manoteó y luego la pelota pegó en el vertical derecho.
En un descontrol absoluto, con Velázquez
jugando de centrodelantero y todos por cualquier lado, llegó el final del
partido. Con la gente en la tribuna en silencio, resignada. La verdad el
panorama era tristísimo. El comentario general era que con este plantel va a
ser imposible subir. Ahora se abre el período de pases y traer incorporaciones
de peso es una necesidad imperiosa.
Más allá de algunos errores defensivos, el
déficit ofensivo es indudable. Sacando los partidos con Torque y Huracán, donde
Rampla convirtió 3 goles en cada caso, en los otros 8 partidos apenas anotó 2
(1 contra Plaza y 1 contra Villa Teresa). En 5 de los últimos 6 encuentros, los
rojiverdes no marcaron. Entonces así es imposible poder ganar y trepar en la
tabla. Esto no necesariamente es responsabilidad de los delanteros, sino que todo nace desde un mediocampo que recupera poco y distribuye mal.
Que las incorporaciones no estuvieron a la
altura de las expectativas tampoco se puede negar. Tras este último partido,
podemos decir que todos tuvieron su oportunidad. Luis “Ronco” López le dio la
chance a Sebastián Cessio, el único refuerzo que todavía no había tenido
minutos. Lo hizo como volante central y sinceramente, nunca hizo pie en el
medio de la cancha, un sector donde Rampla se vio superado durante todo el
partido, perdiendo casi todas las pelotas divididas.
Entonces, habiendo visto a todos, podemos
decir que con este plantel el ascenso parece una quimera. No hay razones para
creer que el rendimiento podrá cambiar cuando se reanude el torneo, pese a que
el “Ronco” tendrá tiempo para trabajar en su idea. Habrá que realizar
incorporaciones importantes, desnivelantes, que se puedan complementar con los
botijas del club que, claramente, ponen mucha más garra que los que vinieron de
afuera.
Se dice por ahí que podría concretarse el
retorno al club de Rodrigo Canosa, Maximiliano Brito y Martín Peula. Más allá
del potencial de cada uno, habrá que ver en qué condiciones llegan, ya que
todos estuvieron bastante tiempo inactivos. Se deberá escuchar al “Ronco” para
que elija a aquellos futbolistas que mejor se adapten a su idea. La buena
noticia es que el 2012, uno de los peores años en la historia de Rampla, ya
llegó a su fin. Esperemos comenzar el año entrante con buen pie, reconociendo
los errores cometidos para no repetirlos en el futuro. Y trabajar día y noche
porque de otra manera, no habrá cábala que nos devuelva a Primera.
El otro día escuché el grito más elocuente que he escuchado en mucho tiempo en un partido de Rampla: "...Reaccionen las tribunas están vacías..."
ResponderEliminarQué verdad!
La verdad es que el nivel es lamentable. La falta de ganas que demuestran algunos jugadores es preocupante, porque sobre las condiciones técnicas todos podemos tener diferencias de apreciación, sin embargo, sobre la falta de actitud creo que la opinión de todos es unánime.
ResponderEliminarPersonalmente no confío en el Director Técnico, creo que es un charlatán y que dificilmente podamos conseguir algún resultado positivo bajo su conducción. Sin embargo lo que juegan son los jugadores. En ese rubro creo que se gasto mucho y mal, se trajeron jugadores para ocupar lugares que perfectamente podrían haber sido ocupados por jugadores de inferiores.
Ojalá el 2013 sea distinto, por ahora, por suerte, se termino el 2012, en lo estrictamente deportivo, para Rampla.
Abrazo.
No pude ir a este último partido, pero el resumen que se describe aquí muy bien explica lo que ha pasado con este plantel...está claro que no vamos a subir si no hay un cambio radical, tanto de jugadores, como de idea y cabeza...En esta división hay que ser inteligentes,marcar,meter y embocar adentro la pelota, pero hemos hecho todo lo contrario...Esperemos se revierta.
ResponderEliminarAbrazo picapiedra y felices fiestas para elbravorampla.
Gracias por tus palabras y por entrar a la pagina Mauricio. Que tengas unas felices fiestas tu también y ojala el 2013 nos encuentre cambiando la pisada! Salu!
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